El compi del mes de Febrero: Philip Marlowe

Se nos viene a la cabeza por obra y gracia del cine a Bogart cuando nombramos a Marlowe y es normal. Leyendo El sueño eterno no me imaginaba a otro para el papel de Marlowe, cuando se lo dieron acertaron de lleno, no tengo dudas al respecto.

Marlowe es un tipo cínico pero el suyo no es un cinismo que le podamos achacar, no en vano ha visto de todo y se ha insensibilizado al ver la corrupción y la inmundicia que habita bajo las eternas apariencias de la américa profunda; incluso es un tipo leal, capaz de meterse hasta el cuello en un estercolero para ayudar a un amigo incluso siguiendo su propio código de conducta, que se reserva un as en la manga para contrarrestar las trampas de los compañeros de timba.

Marlowe no da cuartel:

Cuando la puerta se cerró Mistress Regan preguntó:
- Bien; entonces ¿cómo va usted a enfocar el asunto?
- ¿Cómo y cuándo desapareció?
- ¿No se lo ha dicho papá?
Ladeé la cabeza y sonreí. Se ruborizó. Sus ardientes ojos negros echaron chispas.
- No veo que haya motivos para andar con tapujos - saltó - y no me gustan sus modales.
- Los suyos tampoco me entusiasman demasiado - dije -. Yo no deseaba venir aquí; usted me llamó. Me tiene sin cuidado que se haga la elegante delante de mí o que desayune con whisky. Tampoco me importa que enseñe las piernas. Son piernas preciosas y da gusto contemplarlas. Me importa un bledo que no le gusten mis modales: son bastante detestables y lo lamento durante las largas veladas de invierno. Pero no intente sonsacarme.