El compi del mes: John Dillinger

El probablemente más famoso atracador de bancos de la historia nació en Indianápolis el 22 de junio de 1903, hijo de un tendero ya desde pequeño apuntaba maneras para el crimen dedicándose al hurto de carbón y pequeñas tretas para ganar dinero fácil basándose sobre todo en la extorsión con sus compañeros de escuela.

Ya en su adolescencia para intentar impresionar a las chicas robaba coches y el dinero que ganaba siempre de forma delictiva lo solía gastar en prostitutas y whisky.

Su primer atraco fue a una tienda cuando contaba con apenas 21 años, fue detenido e ingresado en el reformatorio donde aprendió la lección... para que no le volvieran a coger claro; John era una esponja para aprender todo lo relacionado con el crimen. Tras unos intentos de fuga se decidió trasladar a Dillinger a una prisión de verdad. Aunque la vida en una cárcel es por supuesto mucho más dura que en un reformatorio, la gente que está encerrada allí es más peligrosa; John tomó nota de esto y pronto empezó a contactar con atracadores de bancos profesionales, especialmente contactó con dos: John 'Red' Hamilton y Walter Dietrich.

Dietrich que fue alumno del mítico Herman Lamm convirtió a Dillinger en su pupilo, una vez le enseñaron los trucos necesitaban poder actuar juntos pero estaban en prisión con una larga condena por cumplir.

Dietrich y Hamilton tenían un plan de fuga para salir de la cárcel pero necesitaban dinero para que los guardias miraran hacia otro lado, así que hicieron un trato con Dillinger: él conseguiría dinero para el plan de fuga a cambio de introducirle en las altas esferas del hampa, al fin y al cabo a John le quedaban unos meses de condena por un robo menor y ser su primer delito grave.

Una vez en la calle Dillinger empezó a robar y consiguió el dinero que necesitaran y tras una pequeña estancia en la cárcel por un error de cálculo en la fuga de un atraco de la que tuvieron que sacarle Dietrich y Hamilton se juntaron para atracar todo lo atracable.

La Dillinger Super Gang alcanzó gran fama y popularidad, las noticias sobre los atracadores eran seguidas por cientos de miles de personas en la radio como si se trataran de episodios de una radionovela, han sido protagonistas de cómics, películas...

Tal vez se pregunten ustedes por qué caían bien; bueno estamos hablando de la gran depresión americana, la gente no tiene dinero y está endeudada hasta los topes en manos de los propietarios de los bancos que rigen su destino. Ante los ojos del americano de la época Dillinger y los suyos eran como Robin Hood aunque no repartieran el dinero, robaban a los ladrones que robaban a los trabajadores de a pie con el visto bueno del gobierno. Se quedaban las ganancias sí, pero desafiaban el sistema establecido.

El final de Dillinger no está del todo claro: todo apunta que fue tiroteado en Chicago a la salida de un cine, si bien no se encontró su cadáver. Dillinger desapareció de la vida pública y fue declarado oficialmente muerto al no dar signos de vida. Algunas teorías apuntan a que Dillinger llevó una vida tranquila y retirado del crimen con las ganancias de sus andanzas de atracador. Es más incluso en una película llamada Dillinger y Capone (con Martin Sheen como Dillinger) se especula con que fuera un humilde granjero felizmente casado y obligado por Al Capone que descubre su verdadera identidad a participar en un último golpe con la Dillinger Super Gang.