Elfen Lied, Mutantes partiendo humanos en pedazos

Anoche mismo terminé de videar esta extraordinaria obra de Lynn Okamoto (o la Wikipedia dice al menos que es de Lynn Okamoto) y me he llevado una impresión gratísima.

Aún no la tenía, empecé a hacer las gestiones oportunas para verla (ustedes ya me entienden) y se me ocurrió preguntarle a gente que ya la había visto. Consiguieron darme un cierto recelo con la serie: todos hablaban que se trataba de una mutante asesina con mucha mala uva que se da un golpe en la cabeza y adquiere doble personalidad, como Lunch, la que cambiaba de personalidad en Dragon Ball, pero matando gente de verdad y sin sacar una UZI de la nada.

Bueno pues en realidad es bastante más que eso, lejos de buscar situaciones divertidas forzadas con la doble personalidad la serie trata temas mucho más profundos, los sentimientos de culpa, recuerdos que afloran a la luz y que hasta entonces estaban ocultos a fuerza de terapia y violencia, mucha violencia.

A grandes rasgos la serie va de una mutante de una raza llamada Diclonius que tienen unos poderes superbestias, disponen de unos vectores que no diré que son exactamente para no destripar demasiado y tienen unos cuernecitos en la cabeza. Lucy es una Diclonius que escapa del centro de investigación donde está siendo investigada, en la huída se da un golpe en la cabeza y desarrolla dos personalidades: una dulce e inocente llamada Nyuu y la de la mala leche y asesina llamada Lucy. La chica es encontrada por un estudiante universitario y su prima en forma de Nyuu de hecho la llaman Nyuu porque es lo único que es capaz de decir.



Esta es Nyuu, la parte buena de la chica. Para comérsela vamos

Lo de la violencia no lo digo de forma gratuita, la serie es un pelín cafre y cuenta con bastantes desnudos, desde el principio del primer capítulo asistimos a una matanza que da gusto verla.




Y esta Lucy, la parte destrozagente después de hacer una de las suyas.

Mención aparte merece la banda sonora, cuando uno se dispone a ver una serie anime espera oír una de esas retahílas de música pseudo-electrónica cantada por algún J-Idol pero en Elfen Lied nos encontramos una banda sonora totalmente estremecedora, incluso el Opening (llamado Lillium) está cantado en latín por una melodiosa voz acompañada de un entramado de piano y cuerdas, los dibujos de la presentación hacen referencia a cuadros de Gustav Klimt.

La serie es corta algo que juega a su favor porque alargarla innecesariamente sólo habría perjudicado la trama, los personajes de relleno no le hacen ningún favor a ninguna serie. Consta de 13 capítulos y un OVA que cuenta lo que pasa entre los capítulos 10 y 11 además de tapar algún agujerillo argumental.