Bobobo, el retrato animado del absurdo

Siempre he considerado que tengo un sentido del humor peculiar. Mientras todos se descojonan con Scari Movie, yo sólo he podido ver la primera. La segunda estuvo a punto de sacarme del cine, y en cuanto a las demás ni me he molestado en gastar mi ancho de banda para descargarlas. No estoy diciendo que sea un tipo super-inteligente (de hecho los chistes que más gracia me hacen son los más tontos); lo que digo es que siempre he sido un fan de Faemino y Cansado, Monthy Python, Pedro Reyes, y últimamente el gran Antonio Reguera, el humor absurdo me gusta, a lo mejor yo mismo soy absurdo; eso explicaría muchas cosas.

Si ustedes son como yo y buscan el sinsentido dentro del sinsentido a la hora de reír no duden en agenciarse Bobobo, es la historia de un héroe que lucha con los pelos de la nariz y se enfrenta al imperio Margarita que quiere dejar calvo a todo el mundo con su ejército de cazadores de pelo.

La serie es japonesa y como intuyen está repletita del típico humor japonés; iconoclasta y de mucho colorido. En Bobobo se dan situaciones como interrumpir un combate con una obra de teatro en la que los luchadores toman papel, abrir la cabellera afro de Bobobo para sacar personajes variopintos de la nada, como dos ardillitas que poco a poco nos cuentan su historia de amor, también hay un hombre que vive en la nariz de Bobobo. Entre los compañeros de Bobobo podemos encontrar un hombre de gelatina, otro con la cabeza de helado de fresa, una estrella-erizo naranja (recuerda mucho a Sonic) o una chica normal (esa es su rareza, gran paradoja).

Son 76 capítulos, algunos de sus absurdos nombres son:

La liberación de las almas, esto es piro, piro, piro... pirochi

Protejamos el medio ambiente! La contraseña es cuesco pero que no huela

El castillo de los ninjas del viento y la nube. Labios, lápices de labios ¿Qué clase de dibujos son estos?

Les dejo para acabar tres tutubos para que se hagan una idea. No son momentos aislados, prácticamente la serie es entera así de absurda.