The Cure paso a paso: Faith

En el año 1981 ve la luz uno de los discos más tristes de la banda del Sr. Smith, un disco gris tocado con la complicidad de las penumbras, de la estela de un lápiz de carbón.

Abre el disco The holy hour con una dura y repetitiva melodía de bajo a la que acompaña una fantasmagórica guitarra muy presente en todo el disco a la que le sigue la cascada de complejidad de Primary en un tema más movido sin punteos, sólo acordes recortados y fugaces, difusos.

La tercera canción fue single y tiene como protagonista el bajo de la intro, Other Voices es una declaración de intenciones dando un mensaje de soledad y locura: "Susurro tu nombre en una habitación vacía" la voz de Robert es un lamento y la batería de la canción como la de todo el disco es cartilaginosa.

All cats are grey empieza con una intro de percusión y unos teclados lánguidos y perezosos y Robert canta desde el fondo de una caverna, es un tema noctámbulo (viene del refrán inglés at night all cats are grey que viene a ser la versión del nuestro de noche todos los gatos son pardos) es un tema profundamente triste y alicaído.

Siguiendo con la misma tónica The Funeral party empieza con unos teclados que llenan todo el espectro de la melodía la canción habla del amor más allá de la muerte y de la eternidad de los sentimientos: "Dos figuras pálidas/se lamentan en silencio/en la silenciosa tierra/Juntas/En la vejez y la tristeza" valga la redundancia, el tema es totalmente espectral, indefinido, difuso, inerte.

Casi sin esperártelo te tropiezas con Doubt y sus acordes redoblados para dar fuerza al tema y Robert cantando con claridad al tema sin los efectos de eco en algunos momentos casi gritando, poniéndote los pelos de punta y dándote un sobresalto ya que no puedes esperar algo así en ese momento.

The Drowing man es una canción aplastante y llena de matices que consigue agolpar la inquietud en el oyente a base de pequeños matices ocultos tras el riff de guitarra en forma de vaivén, revelando claves para el oyente obsesivo al que le gusta desmenuzar.

Para cerrar el disco el tema que da nombre al mismo. Faith es una canción de una sencillez apocalíptica más que de esperanza parece una canción sobre la falta de la misma, con su guitarra de sonido casi inexistente y su bajo de presencia sigilosa y triste.